Al igual que las otras culturas del Paleolítico superior, los Magdalenienses disponían de un equipamiento técnico variado y adaptado a las múltiples actividades cuotidianas tales como la caza y la pesca. Los vestigios que se conservaron son de origen mineral y óseo (asta de cérvido, hueso, marfil). Eran usados en la confección de las extremidades activas de los instrumentos. Finalmente, los mangos y otros elementos de madera y fibras vegetales (hoy desparecidos) no tienen que ser olvidados.