Ordenado sacerdote en Estrasburgo en 1933, André Glory desarrolla sus investigacions sobre la prehistoria en Alsacia (su tesis defendida en 1942 trata de la “civilización del Neolítico en la Alta-Alsacia »), en el Suroeste de Francia, donde estudia numerosas cuevas ornadas y en el norte de África, donde se interesa tanto a las industrias como al arte rupestre. En 1952, llega a ser ingeniero en el CNRS y emprende, bajo la autoridad del abad Breuil, el dibujo de los grabados de Lascaux. Hasta el año 1963, el abad Glory identifica cerca de 1500 figuras, produciendo alrededor de 120 m2 de calcos, todavía hoy en día ampliamente inéditos. En 1957-1958, también se le encarga la vigilancia arqueológica de los trabajos de climatización de la cavidad. En 1960-1961, lleva a cabo la excavación del Pozo, lo que le lleva al descubrimiento de una lámpara en arenisca roja que tiene una decoración incisa. Los trabajos del abad Glory han aportado las primeras observaciones que permiten plantear el estudio de las decoraciones y la documentación arqueológica relativa a la ocupación de la cavidad.

DELLUC (Brigitte), DELLUC (Gilles). – Lascaux retrouvé, Périgueux, Pilote 24, 2003, 364 p., ill.